Los ordenadores se han convertido en partes esenciales de nuestra vida moderna. Los utilizamos para el trabajo, la escuela, las compras, el entretenimiento y casi todo lo demás.
Pero, ¿cuál fue el origen de estos innovadores dispositivos y qué les depara el futuro? He aquí cómo ha cambiado el ordenador a lo largo del tiempo.
Contenidos
El primer motor de computación automática
Los primeros motores de computación automática se inventaron en el siglo XIX y se denominaron Máquina Diferencial de Babbage. Sin embargo, fue conceptualizada con anterioridad por Johann Helfrich von Müller.
Müller era un ingeniero alemán que esbozó en papel una propuesta de estructura para este ordenador a finales del siglo XVIII. Sin embargo, por desgracia para él, la tecnología aún no había llegado al punto de poder construir el dispositivo él mismo.
La máquina diferencial de Babbage era enorme, pesaba unas cinco toneladas. Estaba diseñada para resolver problemas matemáticos complejos que tardaban mucho tiempo en resolverse manualmente.
Algunos sostienen que el Electronic Numerical Integrator And Computer (ENIAC) fue el primer ordenador real. Más de un siglo después de la invención de la máquina diferencial de Babbage, John Mauchly inventó este dispositivo. Rápidamente solicitó la patente, lo que le permitió atribuirse el mérito del primer ordenador.
El primer monitor de ordenador se creó en 1973
Ni la máquina de Babbage ni la ENIAC se parecen en nada a los ordenadores que utilizamos hoy en día. El primer ordenador con monitor se inventó en 1973 y se llamó Xerox Alto.
El Xerox Alto fue desarrollado por la empresa estadounidense PARC como sistema de investigación. Sus características de facilidad de uso contribuyeron a su posición innovadora en la industria electrónica. Incluso un niño podía manejar este ordenador, lo que era prácticamente imposible para la Máquina Diferencial de Babbage o el ENIAC.
El Alto allanó el camino para las actuales interfaces gráficas de usuario (GUI) con su software gráfico de fácil uso. La pantalla del Alto utilizaba una pantalla de mapa de bits, un dispositivo de salida de ordenador rudimentario, pero bastante impresionante para la década de 1970. Incluso tenía su propio ratón, aunque su aspecto era bastante diferente a los que utilizamos hoy en día.
El primer portátil disponible al público llegó sólo nueve años después del primer monitor
El Osborne 1 fue el primer portátil que se puso a disposición del público. Fue creado por Adam Osborne, un autor y editor de software británico, en 1981. Este portátil tenía su propio monitor, como el Xerox Alto, pero sólo tenía cinco pulgadas de ancho. Tenía 64K de memoria de acceso aleatorio (RAM), 4K de memoria de sólo lectura (ROM) y dos unidades de disquete.
Aunque este portátil causó ciertamente una gran discusión en la industria tras su lanzamiento, no era precisamente conveniente como ordenador portátil. Al principio, el Osborne 1 no tenía batería. Por lo tanto, era necesario enchufarlo a una toma de corriente en todo momento durante su uso. Algunos años después de su lanzamiento inicial, los desarrolladores comenzaron a incluir una batería en el portátil. Sin embargo, ésta sólo proporcionaba una hora de uso inalámbrico.
Los ordenadores modernos han ampliado los límites que nunca hubiéramos podido imaginar
El ordenador ha recorrido un camino increíblemente largo a lo largo del siglo XXI. Hemos visto mejoras drásticas en la calidad de la imagen, el almacenamiento de la memoria y la duración de la batería, además de otros elementos. También el tamaño de estos dispositivos se ha reducido gracias al uso de componentes cada vez más pequeños como los diodos Schottky – puedes ver más aquí sobre ellos – haciendo que se reduzca su grosor y su peso hasta límites que no imaginábamos. Pero, ¿qué les depara el futuro a los ordenadores?
Hay muchas cosas que la gente quiere ver en los ordenadores del futuro: baterías que duren todo el día, velocidades de procesamiento aún más rápidas y gráficos aún mejores. Pues bien, las empresas tecnológicas ya están estudiando cómo mejorar estos aspectos. Lenovo ya ha lanzado un portátil con doble pantalla. Mientras tanto, algunos ordenadores que están ahora en el mercado -como el Dell XPS 13 y el HP Spectre x360- tienen increíbles pantallas 4K.
Pero, sobre todo, el ordenador cuántico está tomando el escenario como el futuro de la informática. Los ordenadores cuánticos son bastante diferentes a los que encontrarás en una tienda. Estas máquinas utilizan las propiedades de la física cuántica para realizar operaciones. La diferencia clave entre los ordenadores tradicionales y los cuánticos es la forma en que almacenan los datos. Los ordenadores convencionales utilizan bits, mientras que los ordenadores cuánticos utilizan bits cuánticos o “qubits”.
Por tanto, los ordenadores cuánticos pueden generar soluciones a grandes problemas con la ayuda de complejos algoritmos de aprendizaje. También pueden considerar y procesar múltiples resultados y combinaciones de forma simultánea, lo que los hace súper rápidos en su funcionamiento. Lo más emocionante de esta tecnología es que, dentro de diez años, estos ordenadores podrían incluso aportar soluciones a crisis mundiales importantes, como la pandemia de COVID-19 y el cambio climático. Estas capacidades harían que los ordenadores cuánticos pudieran salvar vidas, lo que supondría un gran paso tecnológico para la humanidad.