Efectos teletrabajo
Medicina

Efectos del teletrabajo en la salud

El teletrabajo se ha convertido en una interesante opción para muchas personas, entre ellas quienes desean pasar más tiempo en casa para disfrutar de la educación de sus hijos, además de muchos otros casos. La comodidad de trabajar de forma remota resulta algo atractivo, asociado tanto a ventajas como desventajas, especialmente desde el punto de vista de nuestra salud.

Si te interesa conocer más sobre los efectos del teletrabajo y otros temas importantes relacionados con nuestra salud, puedes consultar el blog Microbiota y Bienestar donde profesionales sanitarios comparten sus conocimientos y experiencia en el campo de la medicina junto a consejos que pueden ayudar a disfrutar de una mayor calidad de vida.

A continuación, nos concentramos en las ventajas del teletrabajo y los efectos positivos y negativos que puede tener sobre nuestra salud.

¿En qué consiste el teletrabajo?

El teletrabajo o trabajo remoto, se trata de un concepto en tendencia desde que la emergencia sanitaria nos obligó a permanecer bajo confinamiento y esta forma de trabajar se convirtió en la mejor alternativa para continuar la actividad laboral. El concepto se refiere a una modalidad de trabajo donde se pueden cumplir las tareas inherentes al cargo sin tener que acudir a la oficina.

Teletrabajo

La práctica del teletrabajo es posible gracias a las herramientas tecnológicas actuales, que permiten una comunicación fluida y en tiempo real.

¿Cuáles son las ventajas que tiene el teletrabajo?

Algunas de las ventajas más evidentes incluyen la posibilidad de ahorrar tiempo que antes se invertía en desplazamiento a la oficina, pasar más tiempo en casa y conciliar la actividad profesional con la vida personal gracias a la autogestión de horarios. Por supuesto, también entraña algunos efectos negativos sobre nuestra salud que deberían ser considerados.

Efectos del teletrabajo en la salud

Primero, cuando se pierde el hábito de salir de casa a diario, se reduce el contacto humano y la oportunidad de interactuar con otras personas que puedan ayudarnos a gestionar el estrés, relajarnos y proporcionarnos bienestar. Las jornadas laborales cumplidas en casa y en soledad, pueden ocasionar un incremento en los niveles de estrés y ansiedad en trabajadores remotos.

Adicionalmente, también se ha podido comprobar desde hace décadas que estar mucho tiempo sentado frente al ordenador puede terminar produciendo el siguiente conjunto de síntomas físicos:

  • Tensión cervical, relacionada con utilizar equipamiento inapropiado para el trabajo.
  • Irritación ocular por mirar a la pantalla del ordenador durante ocho horas al día.
  • Dolores musculares y del cuello.
  • Dolor de cabeza.
  • Episodios de frustración, estrés y ansiedad.
  • Insomnio, trastorno de las horas de sueño.
  • Fallos del sistema digestivo relacionados con el sedentarismo (digestión lenta, estreñimiento, gases, sensación de saciedad, etc.).

Todo lo anterior se ve empeorado por el hecho de que la falta de desplazamiento hace que el gasto energético disminuya de una forma considerable. Entonces, el sedentarismo se convierte en el enemigo principal de los trabajadores remotos que no dedican al menos una hora de su día a realizar alguna actividad física en intensidad moderada.

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